Empieza a hacer buen tiempo, y la Cerdanya ofrece un montón de actividades para hacer.
Además de las excursiones a pie, a caballo, en bici, las rutas de senderismo, los vuelos en globo y otras muchas, una actividad que te proponemos y que quizás no es tan conocida, se llama “Las llaves de las iglesias de la Cerdanya”.
Es un proyecto que se lleva a cabo en colaboración con el Obispado de Urgell. Se trata de unas visitas que te permiten conocer los interiores más espectaculares de las iglesias románicas de la comarca.
La Solana y la Obaga
A partir de dos itinerarios, el de la Obaga y el de la Solana, puedes visitar, en compañía de un guía especialista en el patrimonio del Pirineo, cuatro iglesias en cada ruta.
Vas a conocer la iglesia más antigua de la comarca, la que conserva pinturas murales de cariz popular del siglo XVIII o la que está rodeada de un paisaje espectacular.
Si escoges el recorrido del Obaga, descubrirás las iglesias de:
- Santa Maria de Talló (Bellver de Cerdanya). Es la más peculiar de todas; la llaman la catedral de la Cerdanya y en ella se venera la imagen románica de la Virgen de Talló, del siglo XIII.
- Sant Julià de Pedra (Bellver de Cerdanya), una iglesia prerrománica y una de las más antiguas de la zona.
- Sant Joan Baptista de Riu de Cerdanya: es de una sola nave con capillas laterales de planta cuadrada y un ábside semicircular. La planta es de cruz latina.
- Sant Pere d’Alp: representativa de las fórmulas de la arquitectura románica inicial y una de las más ambiciosas de la época.
Este itinerario no está recomendado para personas con dificultades de movilidad, ya que el acceso a Sant Julià de Pedra es algo complicado.
Si te gusta más el recorrido de la Solana, conocerás las iglesias de:
- Santa Maria d’All (Isòvol): de una sola nave, con techo de madera y ábside semicircular.
- Santa Maria de Quadres (Isòvol): del siglo XIII, fue un hospital de viajeros.
- Santa Cecília (Bolvir): dispone de una sola nave, con dos capillas adosadas a modo de crucero.
- San Climent de Talltorta (Bolvir): su atractivo principal son las pinturas, que datan del siglo XVIII y han sido restauradas. Son únicas en el Pirineo.
El precio de las visitas es de 12€ por persona (a partir de 8 años) y es necesario un mínimo de 5 personas para llevarse a cabo.
La visita se hace en coche particular y empieza a las 11h.
Puedes consultar el calendario de todas las visitas y hacer las inscripciones aquí.
Por supuesto, si decides alojarte cerca, puedes escoger alguno de nuestros establecimientos.
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